Por: Florencia Leal Del Castillo, Directora Ejecutiva de la Cámara del Sector Electrodomésticos 

La Cámara del Sector de Electrodomésticos nació en 1997 con el objetivo de luchar de manera articulada contra el contrabando y promover la formalización de las marcas que se vendían en el país, algunas con operación solo desde Panamá. El apoyo de la Aduana de la época fue fundamental. Al mismo tiempo, el país estaba consolidando la estrategia respecto de las sustancias agotadoras de la capa de ozono que promueve el Protocolo de Montreal y la Unidad Técnica Ozono (UTO) en Colombia, asunto sustancial en el sector. Los dos temas motivaron la consolidación de un grupo de fabricantes, que ya eran miembros de la ANDI, y la ampliación a los demás actores formales importadores y comercializadores.

 fabricantes de Colombia y el mundo de electrodomésticos, gasodomésticos y pequeños artefactos, sino también de refrigeración comercial, pilas y productos de iluminación. Sin embargo, la agenda ha cambiado sustancialmente a temas regulatorios y de responsabilidad y compromiso de todo orden, información al consumidor para que haga una compra reflexiva y reciba datos de desempeño energético y ambiental, y manejo de residuos al final de la vida útil de los artefactos, entre otros. La competencia es muy agresiva y se trata de un tema complejo que puede amenazar a algunos actores. Por lo tanto, se promueve el respeto a las normas de competencia y que no haya prácticas desleales ni restrictivas.

Seguiremos trabajando para que el consumidor valore las prestaciones de los equipos y no solo su precio, y que consuma de manera consciente y responsable. Es también estratégico que se consoliden canales de comercialización variados, pequeños y grandes distribuidores, retail, vendedores especializados y plataformas digitales.

Es fundamental, además, continuar fortaleciendo las escalas de exportación que permitan asumir los altos costos de demostración de cumplimiento con las regulaciones internacionales. Y desde lo técnico, se seguirán desarrollando estrategias de conectividad que faciliten nuestro día y día. 

El sector está buscando mecanismos de apoyo para que los estratos 1 y 2 también tengan acceso a artefactos nuevos y eficientes, que lleguen a todos, incluyendo a mujeres cabeza de familia, y no se sigan utilizando equipos viejos e ineficientes de tercera mano, o se mantengan actividades que afectan el ambiente, como lavar de manera manual o cocinar con leña, cuando se pueden construir alternativas de bienestar.