La Revista A de la ANDI consultó a los candidatos a la Presidencia de la República sobre la economía y cómo reactivar el sector empresarial colombiano.
A continuación la entrevista otorgada por la candidata Piedad Córdoba en la edición 264 de la Revista A.

Revista A: ¿A qué temas les dará prioridad en su propuesta económica?

Piedad Córdoba: Los últimos gobiernos que ha padecido Colombia han sido fundamentalmente antiempresariales. El resultado de todos ellos –fuera el objetivo buscado o no– ha sido la destrucción del tejido empresarial colombiano. Estas afirmaciones pueden parecer una provocación o un deseo de llamar la atención en medio del estruendo de voces de esta precampaña electoral. Pero no es así en absoluto. Un análisis riguroso de datos demuestra la exactitud de estas palabras y cómo las políticas de los Pastrana, Uribe y Santos condujeron a la desaparición de la gran empresa de nuestro país.
En 1970 el sector industrial representaba el 25% del PIB. En 2017, este porcentaje es del 12%, apenas la mitad. La desindustrialización del país es un hecho irrefutable y la causa ha sido la implementación sistemática de políticas que benefician a los productos extranjeros y perjudican a los nacionales.
Años de prácticas económicas erradas, injustas e ineficientes han hecho retroceder nuestra economía a los tiempos de la Colonia. Exportamos materias primas sin valor agregado (ocho de cada diez dólares de la exportación proceden de materias primas) e importamos productos manufacturados de alto valor agregado (ocho de cada diez dólares destinados a la importación).
En paralelo, la economía sufre un proceso de creciente “financiarización”. Los activos de la banca pasaron de representar el 23% del PIB en 1990 al 48% en la actualidad. La economía especulativa, de casino, se impone sobre la economía productiva.
Si no hay industria no hay empleos dignos, de calidad y con salarios justos. Si no hay buenos salarios, la demanda interna disminuye y la economía se ralentiza. Si no hay producción nacional, nuestros jóvenes, la generación mejor preparada de la historia de Colombia tiene que emigrar y poner sus conocimientos al servicio de otro país.
Como Presidenta de Colombia, mi prioridad será un plan de reindustrialización del país para el que convocaré a todos los agentes económicos y sociales. Propondré una alianza entre el Estado, los empresarios, los trabajadores y los consumidores para levantar una industria sólida y pujante que permita lograr un país mejor, más desarrollado y más justo.

Revista A: ¿Cuál es su propuesta para impulsar el desarrollo empresarial en Colombia?

P.C.: Podemos construir una industria colombiana si desde el Estado la impulsamos y la dotamos con las herramientas necesarias. Hay un enorme espacio de diversificación, desde la agroindustria –donde podemos y debemos ser una potencia regional– hasta el turismo, las energías renovables, la petroquímica, los astilleros y el diseño de software informático.
La promoción de la pequeña y mediana empresa juega un papel fundamental en la construcción de una Colombia que sea potencia industrial. Nuestros emprendedores han demostrado sobradamente su capacidad, iniciativa, imaginación y talento. Solo necesitan un marco adecuado para poder cumplir su sueño, que es el sueño de todos. La fiscalidad actual –injusta y regresiva– no puede ser una carga. Tampoco la maraña burocrática que ralentiza y encarece los procesos y en cuyos recovecos encuentra acomodo la corrupción. Solo 24 horas y cinco sencillos pasos deberían bastar para formalizar la inscripción de una pyme, como sucede en los países más avanzados.
Colombia puede. Hay esperanza, hay alternativas. Se trata de tener el coraje para llevarlas a cabo. Cuento con todos y todas ustedes para lograrlo.

Acceda a las entrevistas de los demás candidatos en la edición 264 de la Revista A.