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agosto 11 de 2022
Propuestas para el próximo gobierno: lineamientos generales

Gustavo Petro recibe un país con una clara tendencia de recuperación, que continúa siendo una economía líder en la región y se encuentra dentro del grupo de las emergentes.

Colombia, en los últimos años, ha mostrado la solidez de sus fundamentales y una capacidad de sobreponerse a condiciones adversas. Lo anterior no implica que todos los problemas estén resueltos o que el país no tenga grandes desafíos. Por un lado, es importante fortalecer nuestra visión de largo plazo y trazarnos la ruta hacia el futuro. En esta dirección, el plan de desarrollo se convierte en un documento que esboza la visión de futuro y que debe contar con la participación de los diferentes actores económicos y sociales. Este es el primer desafío que tenemos como país.

Igualmente, es importante abordar las reformas estructurales que se han venido discutiendo, como son la pensional y a la justicia, y las medidas estructurales, tanto en ingresos como en gastos, orientadas hacia la sostenibilidad fiscal. Y quizás lo más importante es avanzar significativamente en la superación de la pobreza y de las grandes brechas sociales.

Es por esto que desde hace unas semanas la ANDI viene reiterando que el país debe enfocarse en una estrategia claramente delimitada por dos carriles: la superación de la pobreza y el robustecimiento de la actividad empresarial. Estos dos carriles deben funcionar de forma paralela, buscando que los dos grandes objetivos —el desarrollo empresarial y el desarrollo social— se den a un mismo ritmo. Si desconocemos alguno de los dos objetivos corremos el riesgo de retroceder en lugar de avanzar.

Veamos ahora algunas propuestas que venimos analizando, las cuales se enfocan en nuestra concepción de una autopista de dos carriles.

En las últimas décadas, Colombia ha logrado avanzar en los indicadores de pobreza monetaria y pobreza multidimensional. No obstante, no podemos desconocer que con la pandemia se dio un retroceso. Este deterioro en las condiciones de vida de la población más vulnerable debe revertirse rápidamente y para ello sugerimos estrategias de educación, vivienda, salud y acceso al crédito, que se traduzcan en una mejoría en la calidad de vida de la población; mejoría que en ningún momento debe ser transitoria, sino sostenible en el tiempo. Para la población más vulnerable, donde difícilmente se conciben oportunidades hacia futuro, deberían analizarse los subsidios y focalizarlos. A manera de ejemplo, estaría el caso de los adultos mayores que no han cotizado a pensión. 

 

Con este enfoque se tendría un sector que se estaría formalizando y cuya productividad y generación de riqueza se mantiene en el tiempo. Y, paralelamente, su condición de vida mejoraría en forma importante.

 

Otro de los pilares donde es evidente la necesidad de transitar de forma paralela en los dos carriles está en el tema de empleo. Sin duda, el país tiene que generar más empleo y abrirle oportunidades a la población, en particular a los jóvenes y a las mujeres, que son los grupos que presentan mayores tasas de desempleo. La generación de empleo por parte del sector productivo responde a la dinámica del crecimiento, a temas de pertinencia y a la posibilidad de contar con trabajadores que respondan a las necesidades de los nuevos modelos de negocios. La pandemia nos dejó importantes enseñanzas sobre las ventajas y necesidades de la transformación digital, de la virtualidad y de las nuevas formas de contratación. Allí el país tiene un reto. Nuestra propuesta es crear un espacio de discusión permanente donde se analicen y posibiliten las formas y tendencias modernas del trabajo.

En internacionalización, el país no puede estar aislado de las tendencias mundiales. Los avances tecnológicos, sin duda, deben ser adoptados. Colombia también tiene que jugar un papel más protagónico, en el que las decisiones de comercio internacional tengan en cuenta problemas y tendencias mundiales, como es el caso de las coyunturas actuales de desabastecimiento, altos precios y volatilidades, y cómo estas a su vez están impactando a la población colombiana. En la misión de internacionalización se discutió la política internacional de Colombia contemplando una actitud menos ingenua y más negociadora en el contexto internacional.

Una de las grandes preocupaciones del mundo moderno es el calentamiento global. Cuidar el planeta es un compromiso social que Colombia viene abordando y tiene todo el potencial para ser un líder en este tema. Por ejemplo, el país cuenta con una gran oportunidad poco equiparable, ya que nuestros sistemas de producción son limpios, tanto por la generación de energía eléctrica como por la posición geográfica estratégica privilegiada. En nuestro carril de desarrollo empresarial resulta fundamental contar con un entorno amigable para los negocios, profundizar la economía circular y avanzar en los procesos de reciclaje. En materia de desarrollo productivo, un ejemplo que puede ilustrar esta estrategia de doble objetivo, económico y social, está en la seguridad alimentaria. Colombia tiene la posibilidad no solo de abastecer sus necesidades, sino también de convertirse en una importante despensa mundial. En la agroindustria, el país puede convertirse en un exportador importante. Los mecanismos de agricultura por contrato, sumados a un fortalecimiento de la asistencia técnica y el desarrollo tecnológico en el campo, contribuirían al logro de un sector agroindustrial fortalecido con una mejoría social significativa. Esta actividad también requiere del desarrollo de vías terciarias, distritos de riego y centros de acopio.

En conclusión, tenemos que pasar de la identificación de necesidades a la definición de estrategias y esto es válido para todos los temas: internacionalización, superación de pobreza, generación de empleo, apoyo y soporte al desarrollo agroindustrial y agrícola, y sostenibilidad, para mencionar algunos de ellos. Como mencionamos al principio de este artículo, un tema recurrente es las reformas que el país necesita. Estas reformas ya han sido identificadas y la pregunta más bien sería: ¿por qué no se han logrado tramitar y cómo podríamos lograrlo? El diálogo social es un mecanismo que contribuye a pasar de una discusión de reformas a una implementación de las mismas. Con todo lo anterior, nuestra propuesta general para el próximo gobierno está enfocada en varios frentes: desarrollo económico, desarrollo social, entorno mínimo, ventajas competitivas y aceleradores. Cada uno de estos frentes profundiza en aspectos puntuales de los dos carriles que mencionamos.