jueves, 28 de marzo 2024 | English | INICIAR SESIÓN
septiembre 12 de 2018
Colombia: zona estratégica para Henkel

La empresa de origen alemán ha encontrado en nuestro país un aliado estratégico para la fabricación, distribución y venta de sus productos de belleza y cuidado personal.

Aquisgrán es una ciudad ubicada al oeste de Alemania. Allí fue donde, hace 142 años, Fritz Henkel creó una de las compañías que –identificada con el apellido de su fundador– se ha consolidado como líder mundial en tres líneas de negocio: tecnologías adhesivas, belleza y cuidado personal, y lavandería y cuidado del hogar.

A Colombia llegó a finales de la década de los cincuenta por medio de la adquisición de Laboratorios Artibel. De sus primeros años en el país aún se recuerdan los ecos de los comerciales del champú Glemo y de Silueta, marca que ahora está alineada con su nombre internacional: Schwarzkopf. La incursión del negocio de belleza y cuidado personal en el país se ha caracterizado por el fortalecimiento de una relación de doble vía: por un lado, la creación de un centro de producción y, por el otro, la consolidación del mercado nacional como consumidor de sus diferentes productos.

Sobre las expectativas de crecimiento de esta línea, Alfredo Morales, Presidente de Henkel Colombia destaca el impulso que tendrán los hard discounts como canales emergentes y el posicionamiento de sus marcas en segmentos poblacionales jóvenes.

Otras estrategias se enfocan en los profesionales de la industria de la peluquería. “Tendremos el relanzamiento de Bonacure, la marca de cuidado capilar de Schwarzkopf Professional, con un mayor desempeño y mejor tecnología, complementada con la llegada al país de Scalp Genesis, una completa línea de productos dirigidos a solucionar las principales necesidades del cuero cabelludo”, le comentó Morales a la Revista A.

Además de esta relación de oferta y demanda, existen otras razones que han hecho que cada vez sea más estrecho el vínculo entre Henkel y Colombia, desde lo estratégica que resulta su posición geográfica para el despacho de productos a otros países de la región, “con salidas marítimas por el Atlántico al Caribe y por el Pacífico para ir a Chile o a Perú”, como puntualiza Morales.

La operación del negocio de belleza y cuidado personal ha generado 600 empleos en las instalaciones de la compañía que está ubicada en la zona industrial de Bogotá, donde funcionan sus oficinas y su planta de producción.

Por estas razones, el país ha sido concebido como un clúster de producción, un punto de encuentro entre el proceso de fabricación con proveedores locales (principalmente de empaques) y centros de investigación, que trabajan en conjunto para reforzar el potencial exportador colombiano.

A su actividad productiva se suma el interés de Henkel por crear valor en las comunidades en las que tiene influencia. En el caso de la planta de producción de Bogotá, se destaca el programa ‘Logística Inversa’, que se lleva a cabo en asocio con los proveedores de material de empaque para que, de acuerdo con Morales, “se reutilicen las cajas corrugadas que hacen parte de nuestro proceso productivo”. 

Gracias a este programa, el año pasado se evitó que 177 toneladas de cartón se enviaran a disposición final, lo que previno la tala de 3.363 árboles, así como el uso de 7.965 metros cúbicos de agua; ahorró el consumo de 168.150 kilovatios por hora de energía eléctrica y evitó la emisión de 642,51 toneladas de dióxido de carbono.